No quepan las palabras en una carta
ni los versos en un poema,
ni la voz en la boca,
ni el aliento en un futuro beso;
ni la tristeza por no tenerte cerca
ni el dolor por perderte; -la ausencia de mi-
ni el amor por degradar al cielo.
No quepan palabras en la mirada
cual virgen desciende de una palabra
-sentirte- acallar las calles
y entre huellas dibujar zapatos
-para llegar a ti-
para sentirte.-
para acomodar la voz; en un te quiero
y dar muerte al silencio
y no dejar morir, no dejarte morir,
borrar al tiempo,
y en la vida dejar un verso, -un beso-
y en el alma un te quiero.
ni los versos en un poema,
ni la voz en la boca,
ni el aliento en un futuro beso;
ni la tristeza por no tenerte cerca
ni el dolor por perderte; -la ausencia de mi-
ni el amor por degradar al cielo.
No quepan palabras en la mirada
cual virgen desciende de una palabra
-sentirte- acallar las calles
y entre huellas dibujar zapatos
-para llegar a ti-
para sentirte.-
para acomodar la voz; en un te quiero
y dar muerte al silencio
y no dejar morir, no dejarte morir,
borrar al tiempo,
y en la vida dejar un verso, -un beso-
y en el alma un te quiero.