Me gustaría arrancarte la cara;
desangrarte hasta pedir clemencia
sacar los ojos en el desvelo nocturno
sacarte la lengua; cual piadosa liberas
desgarrar el cuello,
virgen onírica
morder los labios, al dolor el preludio
cual clímax rebanar-te completa
extirpando la cruz
de la entrepierna
cual humedad irradia la inocencia
Me gustaría arrancarte la piel
y en la madera ósea
aburrir de espasmos
La lOcUrA iNTeRNa ¡Enferma!
que amor claudicas en este poema.
Me gustaría..., sabes,
q
u
e
m
a
(para luego) r
e n
n o
s
c
e
n
i
z
a
s quedar con la esencia
de la sangre ahogada
(cuando más)
(¿Habremos caídos?) el dolor "da a luz"
el parto de los caídos...
Cual salvaje es el amor,
cual amor es salvaje
sacarnos cabellos y en ello la cara,
ni del beso agonizante
la vela media apagada
y tu cuerpo
y el mío
carne
para cuervos
en la muerte
de la cama...
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